Los productos convenientes y la responsabilidad ambiental

Sostenible

Las compras a conveniencia van de la mano de envases que se adapten a las necesidades de los consumidores.

Se espera que para el 2023, el 58% de la población mundial viva en las ciudades, y las compras en línea crezcan un 24%, generando un cambio en los hábitos de compra de los consumidores, quienes sin duda demandarán mayor conveniencia y rapidez a las marcas preferidas.

Sin embargo, se espera que la tendencia de consumo responsable se siga afianzando, y los consumidores no solo les exijan a las marcas un mayor cuidado con el medio ambiente, sino que privilegien en sus decisiones de compra a las compañías que consideren responsables con el planeta.

¿De qué manera pueden los puntos de venta satisfacer estas tendencias generando un gana-gana para el consumidor y para sus marcas?

A medida que más personas eligen un estilo de vida urbano, y el tamaño de la familia promedio se hace más pequeño, los puntos de venta deben seguir adaptando su enfoque de negocio para ofrecer más conveniencia a los consumidores y una experiencia de compra positiva que simplifique su día a día.

COMPRAS CONVENIENTES

Los envases cobran gran relevancia frente a esta tendencia.
Las compras convenientes van de la mano de envases convenientes para consumo en el camino o formatos de envases que hagan la vida más fácil: fáciles de llevar, fáciles de abrir y fáciles de almacenar, son soluciones ideales y necesarias para muchos consumidores. 

Por esta razón, en envases para consumo en el camino se espera un crecimiento por encima del 5% anual para los próximos 4 años.

El incremento de compras en línea y la falta de tiempo, han empezado a favorecer las compras más frecuentes y en cantidades más pequeñas, lo que agrega más complejidad a la cadena logística.

Algunas estrategias que están utilizando los puntos de venta incluyen la introducción de segmentos relacionados con conveniencia, así como la utilización de nuevas tecnologías para facilitar y tener unas mejores experiencias de compra. 

El manejo de códigos únicos empieza a afianzarse en los canales físicos y virtuales, facilitando el almacenamiento de datos y trazabilidad, aliados indiscutibles en la mejora de eficiencias y cumplimiento de pedidos en tiempo real.

Las tecnologías de envasado inteligente, que ya se ven en algunos mercados, y la practicidad de los envases para facilitar el almacenaje y distribución serán claves para hacer frente a estos nuevos hábitos del consumidor.

Actualmente el 33% de los consumidores escoge productos que considera que están haciendo algo positivo a nivel social o ambiental.

La preocupación del consumidor por tener soluciones más sostenibles para el planeta seguirá creciendo, enfocándose en la reducción de desperdicio de comida y de empaques, generando una presión que los fabricantes y puntos de venta deben saber anticipar.

Algunas alternativas renovables que se están tomando son la priorización de opciones más sustentables en envases como los fabricados a base de papel (materia prima renovable), la reducción del peso de los empaques, la comunicación del impacto ambiental de los productos y la utilización de envases que sean más eficientes para distribución y exhibición, bajando costos de transporte y combustible.

La exigencia a los productores por el reciclaje y la trazabilidad de sus productos seguirá creciendo e influyendo las decisiones de compra.

El consumidor de hoy quiere saber si las marcas están “haciendo lo correcto” y premiará sin duda las alternativas amigables con el medio ambiente, que ofrezcan una propuesta de valor robusta frente a la sostenibilidad, promoviendo materias primas de fuentes renovables y reducción de desperdicios.

La conexión con el consumidor será clave para que éste tome las mejores decisiones de compra y en este sentido la educación va a ser primordial, capitalizando nuevas tecnologías como la realidad aumentada o el código único en los envases, pues se puede construir un ecosistema digital que genere una interacción en el punto de venta para conocer mejor los productos que está llevando, y darle así el poder al consumidor. 

El uso de tecnologías inteligentes en los envases que permita a los consumidores tener información clara del origen de los productos, para tomar decisiones responsables en sus compras, será cada vez más frecuente.

Los puntos de venta y jugadores de la industria, conscientes de estas tendencias, han concretado sus compromisos con acciones puntales, buscando reducir su impacto en el medio ambiente.

Reconocidas cadenas a nivel mundial como Carrefour, Tesco y Walmart se han comprometido a tener para el año 2030 el 100% de los envases reciclables, reutilizables o biodegradables. 

De igual manera, jugadores importantes en la cadena de valor de la industria de alimentos han definido sus metas de responsabilidad social en función de los indicadores del Pacto Mundial de las Naciones Unidades.

Esta multinacional sueca se comprometió a alcanzar a nivel global una tasa de reciclaje del 40% para el 2020, así como también a garantizar que, para ese mismo año, el 100% de sus envases provengan de fuentes renovables. Hoy, el 100% de los envases son reciclables y hasta un 82% en Colombia vienen de fuentes renovables. 

Los cambios se están dando y cada vez serán más rápidos por lo que será necesario anticiparse y adaptarse con velocidad para tener las soluciones que el mercado estará demandando y que empezarán a moldear los nuevos hábitos de compra.

Mauricio Contreras
Director de mercadeo de Tetra Pak Andina

Tomado de El Portafolio