Con la familia en casa más horas del día, el consumo ha aumentado. Estas son algunas recomendaciones.
‘Quédese en casa’, ‘lávese las manos’, ‘desinfecte las zonas comunes de su casa si tuvo que recibir una visita’, ‘limpie las bolsas que le llevan a domicilio’… esas indicaciones en tiempos de cuarentena surten efecto en el costo de los recibos de los servicios públicos de los colombianos, lo que se junta con el hecho de que en muchas familias los ingresos bajaron porque algunos de sus miembros perdieron el empleo, eran trabajadores informales o están en licencia no remunerada por la crisis que ha desatado el coronavirus en las empresas.
Si bien el Gobierno ha tomado medidas para aliviar el bolsillo de los ciudadanos con los servicios públicos, a los ciudadanos no les queda más remedio que ahorrar. Pero, ¿cómo hacer eso si el aislamiento dentro de las casas mantiene a veces a toda la familia durante más horas del día en el hogar?
Varias entidades hacen sugerencias, pero la aseguradora Liberty en particular hizo recomendaciones que le ayudarán a controlar el desbordamiento del gasto en servicios públicos, pues la cuarentena continúa.
Con la luz
Pocas personas aceptan que las tomas de los electrodomésticos que no están en uso siguen moviendo la aguja de los medidores del servicio de electricidad. En consecuencia, los cargadores del celular quedan en la toma sin el celular. Recuerde que cargar el móvil consume 15 vatios (W); si la batería ya cargó y sigue conectado, se lleva 0,5 W. Si es el cargador el que está conectado, sin el aparato, el consumo promedio es de 0,2 W. En Colombia, en un estrato 4, el valor que le cobran por kW es de 549 pesos, así que haga cuentas.
Existen múltiples formas de ahorrar luz, pero en tiempos de coronavirus, con una mayor permanencia en casa, es bueno aliarse con la luz del día. Procure realizar la mayor parte de actividades que requieren mucha luz en la jornada diurna, que además resultará benéfica para su salud visual.
Lo más difícil suele convertirse en un reto. Con el uso de electrodomésticos, aunque pareciera que no hay forma de ahorrar, sí se puede. La nevera, por ejemplo, no se puede apagar. Su gasto corresponde a cerca de 662 kW por hora. Pero lo que sí demuestran las estadísticas es que abrir la puerta de la nevera aumenta el consumo de energía. En momentos de mayor permanencia en casa hay mayor riesgo de ir a la nevera con más frecuencia. De usted depende el ahorro con este aparato.
El agua, la más cara
En ciudades como Bogotá, los ciudadanos perciben que el agua es uno de los servicios más costosos. El tiempo en la ducha es uno de los puntos en los que más se puede tomar la decisión de ahorrar el preciado líquido. La recomendación de los expertos es darse duchas de máximo 5 minutos.
En la actual coyuntura de la pandemia, por todos lados indican que hay que lavarse las manos de 3 a 5 veces al día. Si bien en adelante habrá que adoptar esa nueva costumbre, está comprobado que el mayor gasto en el servicio de agua se produce por dejar la llave abierta. En actividades como el lavado de dientes o la afeitada, cierre la llave mientras no necesite el agua.
Revisión de fugas. Revise periódicamente que no haya fugas de agua en los baños o lavaplatos. A veces son imperceptibles y corresponden al 60 % de los incrementos inexplicables en el costo del servicio de agua.
Por su bolsillo, recicle el agua. Algunos trucos que recomiendan los expertos de Liberty apuntan a que, para el ahorro, se aplique la economía de escala. Por ejemplo, puede lavar las verduras y las frutas en un recipiente, para luego utilizar el mismo líquido en el regado de plantas.
Con el gas
El gas, según los testimonios de muchas familias, es uno de los servicios más económicos. Sin embargo, en la cuarentena se ha incrementado su gasto, llegando incluso a triplicarse. Ahorrar en este servicio público es posible con medidas sencillas que recomienda Liberty. Una olla de tamaño más pequeño que el de la hornilla hace que el calor se escape. En el caso contrario, una olla más ancha que el tamaño de la hornilla conduce a que se requiera más tiempo para calentar lo que necesita cocinar. En ambos casos puede ahorrar utilizando el recipiente acorde con el tamaño del fogón.
El tiempo justo. Recuerde que un recipiente tapado tarda menos tiempo en calentar el contenido que tiene. Use tapa y, de paso, tardará menos tiempo preparando los alimentos. Cuando el contenido de la olla llega al punto máximo de temperatura, lo que sigue es la evaporación del contenido que se está preparando (si es líquido) o la sequedad (si es sólido). A partir de ese momento solo estará desperdiciando el fuego y aumentando el costo de su consumo de gas.
Tomado de Semana